La Oficina en Washington para Asuntos Latinoamericanos (WOLA) y el Grupo de Trabajo para Asuntos Latinoamericanos (LAWG) condenan el ataque de la guerrilla de las FARC en Cauca, en el cual murieron 11 soldados. Hacemos eco a las palabras del presidente Juan Manuel Santos, quien destacó, mientras expresaba su dolor por la muerte de los soldados, que "esta es, precisamente, la guerra que queremos terminar." Le instamos a la FARC a que se adhiera estrictamente al alto al fuego unilateral que había declarado, y expresamos nuestra esperanza de que un alto al fuego bilateral pueda ser establecido y respetado en el futuro cercano.
Informes preliminares indican que la reanudación de las operaciones de combate ha llevado a la pérdida de vida y una crisis humanitaria para las comunidades Afrocolombianas e indígenas de esta región. Como tal, instamos a ambas partes a que se adhieran al derecho internacional humanitario y se abstengan de realizar ataques indiscriminados que puedan poner en peligro la vida de civiles.
Animamos a las partes negociadoras a continuar su trabajo en la mesa de negociaciones con un renovado compromiso a alcanzar una paz justa y duradera para todos los colombianos.