Gira papal, clave en caso Iguala.- GIEI
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Carlos Beristain, integrante del GIEI, considera que una reunión del Papa con familiares de 43 normalistas enviaría una señal importante.
Irene Savio



La visita del Papa Francisco a México será una pieza clave para la investigación y resolución del caso Iguala, según Carlos Beristain, del Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes de la CIDH (GIEI) que indaga la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa.

"La visita del Papa será un momento clave para los familiares de desaparecidos de Ayotzinapa y para muchos otros familiares de desaparecidos en México.

"Eso va a contribuir a una resolución efectiva, mientras que la minimización de estos problemas no son estrategias que van a contribuir", afirmó en entrevista el abogado español, especialista en derechos humanos.

El caso Ayotzinapa, apuntó, es emblemático en México, por lo que un encuentro entre el Papa y los familiares de los normalistas enviaría una señal muy importante.

"Es muy importante que se mantenga la atención sobre el caso", agregó.

Dicha señal se sumaría a las muestras de apoyo provenientes de una parte del clero mexicano y organizaciones defensoras de los derechos humanos, como el Centro Miguel Agustín Pro Juárez (Prodh), que es gestionado por jesuitas, congregación a la que pertenece el mismo Francisco y que ha enviado información a Roma.

En este marco, Beristain reiteró que no hay indicio alguno de que los jóvenes desaparecidos en septiembre de 2014 estuvieran infiltrados por el crimen organizado, como sostienen algunas versiones que han circulado incluso en El Vaticano.

"No hay ningún indicio (de que los normalistas tuvieran que ver con el narcotráfico). No estaban infiltrados por el crimen organizado y las autoridades sabían que eran normalistas", dijo Beristain.

De hecho, en coincidencia con la llegada del Papa a México -y tras la publicación del primer informe del GIEI, que cuestiona la versión oficial-, el debate sobre el caso de Ayotzinapa se ha encendido nuevamente.

En días pasados, nueve organizaciones civiles, entre ellas Amnistía Internacional y Wola, denunciaron una campaña de desprestigio contra los expertos del GIEI y le pidieron al Gobierno mexicano apoyar públicamente el trabajo de ese grupo.

"Nos preocupa el silencio por parte del Gobierno de México frente a los ataques difamatorios", escribieron, al precisar que, no obstante, dicha situación significa que el GIEI está cerca "de encontrar la verdad".

De igual forma, también seis premios Nobel, entre ellos la irlandesa Mairead Maguire, la guatemalteca Rigoberta Menchú y la iraní Shirin Ebad, expresaron su respaldo al GIEI.

Esto ocurrió después de que un coronel colombiano acusado de desaparición forzosa -encarcelado y liberado ocho años después- pusiera en entredicho la reputación de la ex fiscal colombiana Ángela Buitrago, quien había acusado al militar en un juicio en Colombia.

Beristain viajó en enero al Vaticano para entregar a altos funcionarios de la Santa Sede información sobre el caso Ayotzinapa.

Según explicó, los contactos con la Iglesia han continuado desde la publicación del primer informe del GIEI sobre el caso, en septiembre pasado.

No obstante, dijo desconocer si la información que él entregó ha llegado a manos del Papa Francisco.