WOLA: Advocacy for Human Rights in the Americas

(AP Photo/Moises Castillo)

30 Oct 2018 | Análisis

9 preguntas (y respuestas) sobre la caravana de migrantes centroamericanos

Una caravana de aproximadamente 7,000 migrantes, incluyendo familias y mujeres con niños, que se originó en Centroamérica y está avanzando por México rumbo a los Estados Unidos. Hoy, el Presidente Donald Trump anunció a través de Twitter que comenzará a cortar, o reducir sustancialmente, la ayuda extranjera a Centroamérica. Según el grupo de investigación e incidencia la Oficina de Washington para Latinoamérica (WOLA), esta podría ser una reacción contraproducente que debilitaría los esfuerzos para abordar las causas de la migración, específicamente, la violencia, la corrupción, la pobreza y la falta de oportunidades económicas.

El viernes, 19 de octubre, la caravana llegó al puente que conecta la frontera entre Guatemala y México, donde las fuerzas de seguridad mexicanas habían levantado barricadas. Los esfuerzos por parte de la seguridad mexicana para detener la caravana resultaron en denuncias de maltrato y uso excesivo de fuerza, incluyendo el uso preocupante de gas lacrimógeno contra los migrantes por parte de la Policía Federal mexicana. Finalmente, los migrantes fueron admitidos en grupos pequeños, mientras otros cruzaron hacia México. Muchos de los migrantes, la gran mayoría viniendo de Honduras, están actualmente en albergues, auditorios, y otras estructuras esperando ser procesados para el asilo en México; otros han decidido continuar el viaje hacia el norte.

Es importante tener en cuenta que las imágenes de los migrantes viajando en grupos grandes pueden generar falsas interpretaciones sobre las actuales tendencias migratorias en la frontera entre México y Estados Unidos: la migración se está disminuyendo a un nivel mínimo histórico, aunque el número de familias y niños llegando en búsqueda de asilo ha incrementado en los últimos meses.

A continuación, WOLA recurre a años de experiencia e investigación sobre la migración y la frontera entre Estados Unidos y México para responder varias preguntas comunes sobre la caravana, la respuesta de Estados Unidos y la respuesta de otras naciones.

1) ¿Por qué se van las personas? ¿Y por qué se van ahora?

Hay distintas variables. Cada migrante probablemente los pesa de manera diferente.

  • Grave inseguridad: Honduras y El Salvador se encuentran entre los países con mayor tasa de homicidios que no están en situación de guerra. Small Arms Survey clasificó a los dos países entre los cinco más violentos del mundo, junto con Venezuela, Siria y Afganistán. Guatemala se ubicó en el 17° lugar, por delante de Colombia y México. La represión policial y, en algunos casos, el abuso absoluto por parte de las fuerzas de seguridad han hecho poco para cambiar la situación.
  • La corrupción rampante significa que, con mucha frecuencia, la clase política de Centroamérica protege y colude con los grupos criminales, incluyendo a organizaciones de narcotráfico. Los “transportistas” locales—las operaciones de narcotráfico que atienden a estos carteles transnacionales del narcotráfico, contribuyen a la violencia en las zonas rurales. Para muchos en Centroamérica, la impunidad es la norma para delitos como la extorsión, la violación y el homicidio. Como ya se ha documentado ampliamente, muchos migrantes sienten que no tienen otra opción que huir, ya que no pueden contar con la protección de la policía local o de las autoridades judiciales.
  • Las sequías, las inundaciones y otros fenómenos relacionados con el cambio climático también están devastando las economías agrícolas y exacerbando el hambre de las comunidades rurales en algunas de las sociedades más desiguales del mundo. Aunque este es un impulsor de migración a largo plazo, también es uno de corto plazo particularmente fuerte en Honduras, donde las intensas inundaciones del año pasado obligaron a muchas personas a abandonar sus hogares, y en Guatemala, donde la sequía ha sido un problema grave durante el año pasado, y donde las fuertes lluvias en otras partes del país, durante la primera mitad de 2018, causaron inundaciones y deslizamientos de tierra.
  • Situaciones intolerables de violencia doméstica: América Latina tiene uno de los niveles más altos de violencia contra las mujeres en el mundo. Las Naciones Unidas ha citado el abuso doméstico y la incapacidad de obtener protección de las autoridades locales, como un factor importante que lleva a las mujeres a emigrar desde Centroamérica.
  • La falta de oportunidades económicas es otro factor significativo. Las probabilidades de obtener empleo son escasas para muchos adultos jóvenes, y emigrar es una alternativa. Si bien es poco probable que los migrantes económicos califiquen para el asilo en los Estados Unidos, México o en cualquier otro país, sus razones para emigrar son entendibles. Los estudios muestran constantemente que las áreas en los Estados Unidos que tienen las comunidades migrantes más grandes son más seguras y más prósperas. Muchos empleadores de los Estados Unidos, especialmente en el sector agrícola, continúan dependiendo en gran medida de los trabajadores indocumentados. Los dueños de negocios, incluyendo la Cámara de Comercio de Estados Unidos, han pedido una reforma migratoria en el país por el reconocimiento de que “los inmigrantes pueden llenar los vacíos crecientes en nuestra fuerza laboral”.

2) ¿Puede Trump cortar la asistencia de Estados Unidos a Centroamérica?

El Presidente, de hecho, no tiene el poder para cortar la asistencia que el Congreso ya ha designado. La Ley de Asistencia Extranjera le da al presidente muy poca autoridad para cancelar la asistencia. A lo sumo, el presidente puede solo transferir un 10 por ciento entre cuentas. Una ley separada, la Ley de Control de Embargo, prohíbe que el presidente retenga dinero que el Congreso ya asignó. El Congreso tiene el control sobre el presupuesto. Sin embargo, el presupuesto para 2018 para Centroamérica puede contener una laguna que le permita al presidente reducir algunos fondos. Afirma que “se pueden poner a disposición hasta US$615 millones para asistencia en los países de Centroamérica”; la palabra clave aquí es “hasta”, lo cual significa que Trump puede tener cierta flexibilidad para obligar a una cantidad menor de dinero.

Además de esto, es absurdo imaginar que al cortar la asistencia financiera a una región problemática podría impedir que las personas intentan migrar.

Como se explica en la base de datos del Monitor Centroamericana de WOLA, al cortar la asistencia se eliminaría dos categorías de fondos:

  • Asistencia dirigida a las prioridades que normalmente son apoyadas por la administración conservadora de los Estados Unidos: asistencia para las fuerzas policiales y militares, la seguridad fronteriza, las reforma policiales, y las reformas de la justicia penal.
  • Asistencia a asuntos de prioridad que muestran cierta promesa en mejorar las condiciones en Centroamérica para que menos personas quisieran irse, incluyendo la seguridad alimentaria, el desarrollo rural, reformas a los sectores policiales y de justicia, los esfuerzos anticorrupción e iniciativas por parte de la sociedad civil para prevenir la violencia.

Actualmente, los Estados Unidos no proporciona fondos de apoyo presupuestario a países de Centroamérica. La gran mayoría de la asistencia se da a organizaciones no gubernamentales y proveedoras de servicios.

3.) ¿Porque la gente están viajando en una caravana?

Como WOLA ha documentado con nuestras contrapartes, los migrantes que viajan a través de México frecuentemente son víctimas de delitos y violencia a manos de grupos criminales y de oficiales corruptos. Para muchos migrantes, la única opción segura es pagar US$10,000 o más por un coyote, o viajar en grupos grandes.

Viajar en caravana es una respuesta lógica. Las familias necesitan irse, por razones descritas anteriormente, pero arriesgan asaltos, robos, secuestros, violaciones o incluso asesinatos si intentan hacer el viaje através de México sin un coyote. La investigación realizada por WOLA encontró que el 99 por ciento de los crímenes contras migrantes reportados a autoridades federales y a varias autoridades estatales en México nunca se investigan por completo. Viajar en grupo minimiza los riegos y hace innecesario el pago a los coyotes.

4.)¿Qué ocurrió con la caravana de migrantes que atrajo tantos insultos del Presidente Trump a principios de este año?

El New York Times reportó lo siguiente sobre la caravana que atravesó México en abril del 2018, organizada por la organización Pueblos Sin Fronteras.

Esa caravana, la cual incluía a muchos hondureños, y que en cierto momento se calculaban 1,200 personas antes de disminuir en tamaño, eventualmente llegó a la frontera norte de México, atrayendo la atención de los medios internacionales. Luego de un tenso enfrentamiento en el paso fronterizo de Tijuana, varios cientos de migrantes pudieron tramitar su petición de asilo en los Estados Unidos.

El resultado para los migrantes que pidieron asilo en los Estados Unidos no está claro. Otros miembros de esa caravana han pedido protección en México, donde las leyes de asilo incluyen una amplia definición sobre quienes clasifican para la protección.

5.) El Presidente Trump ha amenazado cerrar toda la frontera entre Estados Unidos y México para prevenir que los miembros de la caravana se entreguen a las autoridades estadounidenses para buscar asilo, o que crucen la frontera. ¿Qué pasaría si la frontera entre Estados Unidos y México fuera cerrado?

El politólogo Peter Andreas de la Universidad de Brown escribió lo siguiente en el 2003, describiendo lo que ocurrió días después del 11 de septiembre del 2001, cuando se le ordenó a todos los puertos de entrada hacia Estados Unidos que aumentaran las inspecciones al 100 por ciento:

Las ventas minoristas en las ciudades fronterizas de Estados Unidos se desplomaron inmediatamente, ya que los compradores mexicanos se quedaron al sur de la frontera. La ciudad de San Diego declaró estado de emergencia debido a la desaceleración de los negocios después del 11 de septiembre… El comercio transfronterizo, el cual se había mantenido en alrededor de US$670 millones (por día), cayó un promedio de 15 por ciento en las semanas siguientes al ataque. Las industrias más afectadas fueron las de electrónicos, textiles, químicos, y las fábricas mexicanas que suministraban partes a compañías automotrices de Estados Unidos.

Diecisiete años después, las economías de Estados Unidos y México están mucho más integradas; el comercio transfronterizo produjo en total US$ 1.7 mil millones diarios durante el año pasado. Detener ese flujo, aunque sea por pocos días, causaría un sufrimiento económico tan agudo que probablemente se sentiría en los índices de la Bolsa de Valores de Estados Unidos.

6.) ¿Cuál es la política de México con respecto a la caravana de migrantes?

México desplegó alrededor de 500 policías federales a su frontera sur con Guatemala para atender la caravana. El gobierno mexicano también ha expresado que planea detener y deportar a cualquier miembro de la caravana que entra a México ilegalmente, y procesar a los que solicitan asilo en el país. Desde el 21 de octubre, por lo menos 1,000 miembros de la caravana han pedido asilo en México y otros están siendo acogidos en diferentes refugios.

Debido al alto número de personas en la caravana y al débil sistema de asilo mexicano, es importante que las autoridades mexicanas se aseguren que las pruebas de protección se realicen correctamente. Un paso positivo es que México ha pedido asistencia del Alto Comisionado de la Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), el cual ha expandido su presencia en México en los últimos años, para asistir en la recepción de la caravana. Si México deporta a individuos sin el debido proceso, podría obligarlos a regresar a situaciones peligrosas.

Además de las confrontaciones en el cruce fronterizo entre México y Guatemala el pasado 19 de octubre, las autoridades mexicanas no han detenido el avance de los migrantes. Periodistas estiman que la caravana se extiende a lo largo de poco más de 3 kilómetros, un movimiento masivo de personas que incluye a niños pequeños. No está claro cómo el gobierno mexicano responderá a la caravana y a la presión de Trump en los próximos días.

7.) ¿Las amenazas reducirán los flujos migratorios provenientes de Centroamérica?

La ira y las amenazas no harán que este problema desaparezca. Mientras las condiciones descritas en la Pregunta 1 persistan en Centroamérica, la presión para emigrar continuará.

8.) ¿Por qué los países de Centroamérica no detienen la caravana?

Los gobiernos no pueden impedir que sus ciudadanos salgan de su propio país o que se reúnan pacíficamente para protestar. Hacerlo sería una violación a sus derechos civiles y sus derechos humanos internacionalmente reconocidos. Asimismo, sería muy controversial a nivel doméstico y tendría sustanciales costos políticos internos.

9) ¿Qué debería hacer el gobierno de los Estados Unidos si los miembros de la caravana llegan a la frontera entre los Estados Unidos y México?

La llegada simultánea de un grupo numeroso de migrantes traerá problemas logísticos a la hora de procesar sus solicitudes, evaluar sus peticiones, aceptar a algunos casos para audiencias de asilo y deportar a otros que no cumplan los requisitos. Sin embargo, este es un problema logístico y humanitario que puede ser atendido, no una “invasión”. Puede y debe ser gestionado de una manera ordenada que trate a los migrantes con dignidad, respete sus derechos y siga los procedimientos legales, así como los compromisos internacionales de los Estados Unidos sobre migración.

A continuación las recomendaciones de WOLA:

  • Los Estados Unidos no puede obligar a México a aceptar a solicitantes de asilo—de acuerdo con leyes internacionales, las personas tienen derecho a buscar asilo en cualquier país que consideran seguro. No están obligadas a solicitar asilo en los países por los que transitan. México, que registró su mayor tasa de homicidios el año pasado, continúa siendo un país inseguro para muchos migrantes.
  • Los migrantes deben tener la posibilidad de llegar a un puerto de entrada seguro para solicitar protección en los Estados Unidos y ser aceptados para iniciar un proceso de refugio de manera puntual. Obstaculizar ilegalmente la capacidad de los migrantes de ingresar al país, a veces hasta por semanas, o tratar de disuadirlos de entrar, viola los compromisos internacionales de los Estados Unidos y pone a esa población en riesgo en ciudades mexicanas fronterizas que tienen altos índices de violencia.
  • Los solicitantes de asilo necesitan una resolución justa y oportuna de su petición, así como apoyo legal para plantear sus casos. Un estudio del año 2015 realizado por la Transactional Records Access Clearinghouse (TRAC) de la Universidad de Syracuse mostró que sin representación legal, solamente el 1.5 por ciento de las mujeres con niños que habían pasado las entrevistas de miedo creíble se les concedió asilo en los Estados Unidos.
  • Mientras sus casos de asilo se encuentran en revisión, sería mejor buscar otras alternativas a la detención que sean más eficientes. (Poner a una familia en detención cuesta US$318.79 al día, según la solicitud de presupuesto de 2019 del Departamento de Seguridad Interior.
  • Los migrantes deben ser tratados con respeto y dignidad por las autoridades de los Estados Unidos. Padres e hijos deben permanecer juntos tras su aprehensión. Las actuales políticas que se discuten al interior de la administración de Donald Trump sobre mantener a las familias en detención por tiempo indefinido o detener a los padres mientras sus hijos son liberados, van en contra de los estándares de detención infantil establecidos en el Flores Settlement y en decisiones recientes de los cortes.
  • Si una pequeña parte de la caravana llega a la frontera, habrá problemas logísticos y retos humanitarios —albergues, boletos de autobús, atrasos en el procesamiento, etc. El gobierno de los Estados Unidos debería estar ya planeando y pensando en cómo manejar todo esto, además de cómo minimizar el impacto en las ciudades fronterizas (en ambos lados de la frontera) y dar un trato humano a los migrantes.